miércoles, julio 16, 2008

Estudio del hábitat de Peñíscola

El pasado fin de semana estuve estudiando el hábitat de Peñíscola. La verdad es que tuve una gran oportunidad, ya que contaba para el estudio con varios ejemplares de distintos sitios:
  1. Un ejemplar macho del hábitat en cuestión, aunque éste pasa últimamente más tiempo en el hábitat de Valencia, pero proviene de allí.
  2. Otro ejemplar hembra del pueblo de al lado, Benicarló, pero que está varios fines de semana al mes en Peñíscola.
  3. La pareja del ejemplar 2 (macho) que también va por Peñíscola varios fines de semana al mes pero que es de más lejos, de Granollers y es interesante ver cómo sabe adaptarse a otro hábitat
  4. Un ejemplar hembra de Torrente, que fue introducido de nuevo en el hábitat pasados 14 años. Habrá que continuar con su estudio a ver cuánto tarda en volver.
  5. Otro ejemplar macho de Valencia, aunque es originario de Requena. Hay que destacar que ya se ha adaptado perfectamente al hábitat de Valencia y esta era la primera vez que se introducía en Peñíscola, luego también habrá que seguirle los pasos para ver cómo le ha resultado la experiencia.
  6. Otro ejemplar hembra, de la Vall d'Uixó, que pasó menos tiempo que el resto en el hábitat, aunque parece que se adaptó perfectamente al entorno y a las costumbres.
  7. Y por último yo, ejemplar de Valencia que emigra contínuamente a Barracas durante los fines de semana y vuelve a Valencia. También hacía unos 14 años que no estaba en Peñíscola, aunque creo que supe recordar varios lugares ya visitados.
Con todo esto, voy a exponer algunas de mis numerosas fotos hechas durante el viaje donde se pueda apreciar el comportamiento de todos ellos en Peñíscola.



El primero a estudiar es el ejemplar de Peñíscola en su casa. Se ve claramente que se desenvuelve felizmente en su entorno.




El ejemplar de Requena se adapta en principio muy bien al entorno, haciendo amistad enseguida con el resto de las especies.



El resto también parece que se han introducido con toda normalidad. Destaca la curiosidad del ejemplar de Granollers, ya que va en todo momento acompañado de su cámara de fotos, capturando todo momento. Será interesante ver su reportaje...



Aquí se aprecia la curiosidad del ejemplar de Requena por la cámara de fotos del de Granollers. Esto demuestra la gran confianza del entorno, aunque no he llegado a observar que haya habido un intercambio de hembras también... Por ahora sólo objetos materiales.



Por otro lado, cabe destacar la buena disposición del ejemplar de Peñíscola para que el resto de ejemplares se encuentren cómodamente en el hábitat y no extrañen su casa.



Pero aquí llega la primera gran prueba: una gran tormenta se acerca por el horizonte. Pero... parece que no se asustan sino que demuestran sorpresa y curiosidad pero no se espantan y huyen a sus casas.



La curiosidad en el caso del ejemplar de Torrente llega hasta tal punto que decide fotografiar reiteradamente el momento, sin miedo a mojarse ni a que le caiga un rayo... curioso descubrimiento...



Pasado el primer susto, la tormenta no cesa, pero parece ser que los ejemplares (incluida yo) no demuestran miedo e intentan hacer su vida normal por el entorno. Y, apesar de que refresca, no se tapan (aún).



La noche cae y la tormenta aún sigue, pero no por eso decaen los ánimos. Se decide seguir con la fiesta en casa.



Los ejemplares se colocan en la mesa dispuestos a relacionarse entre ellos mediante un juego de cartas. No capturé fotos del momento en el que, en menos de 5 minutos, devoran ávidamente una fuente de frutos secos. Es una lástima.



El juego comienza y el ejemplar de la Vall empieza muy concentrado...



Pero luego se relaja y se ve que está en su salsa, literalmente.



Pero para "su salsa", el ejemplar de Granollers, que lo vive como nadie. Se ve que es experto en el tema.



Lo mismo que los ejemplares de Torrente y Requena. En esta foto se les puede ver todos concentrados, aunque, cabe destacar, que el ejemplar de Requena siempre moría el primero. Habrá que añadir esta regla al juego...



Pero a pesar de el buen ambiente que reina en la estancia, el ejemplar de Benircarló sigue algo arisco, como es normal en él. El de granollers ya está acostumbrado y no se asombra lo más mínimo.

Aunque cabe destacar, y hago un inciso, que con el paso de los días se han observado comportamientos algo contradictorios del ejemplar de Benicarló. Comportamientos que no son habituales en ella. Estos comportamientos se pueden apreciar en la siguiente foto:



Esta foto se ve mal, pero la tuve que capturar precipitadamente arriesgando mi vida en el intento, vida que no creo que dure mucho después de publicar esta entrada ^^u



Después del juego y pasada la tormenta, salen a pasear. Aquí se ve otra vez el extraño comportamiento social del ejemplar de Benicarló. ABRAZA A SU PAREJA, algo insólito, sin duda. Y el ejemplar de Peñíscola se ve feliz, como pez en el agua. El de Requena, busca las ranas, para poder relacionarse con más especies, no sólo con los perros.



Aquí foto de grupo tomada por el ejemplar de Peñíscola. Cabe destacar que, ante el frío sorprendente de julio, los ejemplares optan por buscar ropa de abrigo de la nada para pasar el mal trago, aunque los hay más valientesque no  necesitan abrigo...



Tras mucho buscar, consiguen encontrar el lugar donde se perdió al llegar el ejemplar de la Vall: una rotonda con palmeras. Sorprendente el sentido de la orientación de dicho ejemplar que aún no sabemos cómo llegó pero supo finalmente encontrar la casa del ejemplar de Peñíscola.



Tras el paseo, el ejemplar de Torrente queda rendido y cae en la cama nada más verla. Necesita reponer sus fuerzas. ¿Se quitaría las zapatillas para dormir???



Pero parece que lo consigue, ya que al día siguiente trota de nuevo felizmente por Peñíscola.



Aquí, en esta foto, conseguí captar la imagen del ejemplar de Peñíscola alimentándose de las especies vegetales del entorno. Se ve la cara de felicidad que pone al encontrar el tan deseado y buscado fruto de la naturaleza: una variedad de aloe-vera (o algo así).




Aquí se puede ver cómo el ejemplar de Requena lo observa todo minuciosamente para luego imitar lo que ve en su entorno.



En esta foto se puede comprobar perfectamente cómo el ejemplar de Requena consigue mimetizarse casi perfectamente con el de Peñíscola. Reproduce a la perfección el dicho "Allí donde fueres haz lo que vieres". Tanta observación tiene sus frutos.



Esta foto demuestra que ocurrió algo insólito: el ejemplar de Torrente hizo algo que nunca hace, entrar a una Iglesia. Y se repitió en dos ocasiones. Deberé tenerlo en cuenta para ver si se repite próximamente...



Lo mismo que con el ejemplar de Benicarló, que se le ve de nuevo relacionándose con su pareja cariñosamente. Tendré que estudiarlos de nuevo con más profundidad en otra ocasión y en otro lugar, para ver sus reacciones.



Ya acabando, como nota curiosa, cabe destacar que el ejemplar de Valencia-Barracas (usease yo), no se consiguió adaptar muy bien al entorno ya que su cuerpo reaccionó de una manera algo extraña, y empezó a mutar... Y a día de hoy la cosa sigue, cada vez más. Si muto, aviso y pongo fotos.



Para finalizar, esta foto, que demuestra la buena convivencia que han tenido los componentes del grupo bajo estudio. Ya en el último momento, el ejemplar de Benicarló empieza a relacionarse más con el resto de componentes (observar su brazo derecho). Opino que si hubiésemos estado un par de días más, habría acabado mostrando más carantoñas al resto del grupo... Lo anoto para próximo estudio.

Como aún me faltan fotos de otras cámaras, cuando las tenga, haré una próxima entrada con lo que observaron el resto de componentes desde sus cámaras :P

Espero que os sirva mi estudio para realizar algún trabajo o algo en un futuro. Gracias por vuestra atención. Y estad atentos a la próxima entrega ;)

lunes, julio 14, 2008

El huevo de Chiriko

Chiriko ha puesto un huevo. Está solo en la jaula y es chico, pero ha puesto un huevo. Es un expediente X. La única explicación posible y racional que se me ocurre es que haya pasado una gorriona por allí y se haya puesto encima de la jaula de Chiriko y se le haya caido el huevo. Vamos, que le haya entrado el apretón y lo haya soltado ahí mismo. Le he puesto un nido en la jaula para que a la próxima, meta ahí el huevo la gorriona. Aunque para cuando vuelva, Chiriko fijo que la ha destrozado, porque ya me ha desperdigado todas las ramitas de manzanilla que le había puesto dentro y se está comiendo y cocinando el papel que lo tapaba.
La lástima es que el huevo se ha roto. Si no se lo habría puesto a Luke, para que lo incubara, que está clueco y le da por incubar las piedras de su jaula. Lleva así un año y no ha salido ninguna tortolita aún de las piedras. La vida es muy injusta a veces, unos tanto y otros tan poco. Seguiré informando.
Por cierto, si se os ocurre alguna otra explicación al hecho (Chiri está soltero y solo en su jaula), me la decís, a ver si entre todos descubrimos lo que ha pasado. 



Aquí se ve lo grande que es el huevo de Chiri



Y aquí la foto que demuestra que el huevo no es de Chiri: no lo quiere.